Medalla de Agradecimiento
 |
Antigua Medalla |
Descripción Medalla
Anverso: En el campo, una corona de laurel y encina, terminada por una estrella. En la cinta: DON
ENRIQUE DUVAL. Leyenda circular
RECUERDO DE CARIÑO DE LOS EMPLEADOS DEL BANCO COMERCIAL DE CHILE A SU JERENTE.
Reverso: En cartel, abajo: ABRIL 1° DE 1900. En las hojas de una rama de palma
★★★/ A. FRÍAS C./ C URZUA S. / LUIS MONTES V. / M. MONTERO / C. HERQUIÑIGO / ED. PINTO R. / S. ACHONDO / N. GREECK C. / M. MARCHANT L. /★★★. Gráfila de puntos por ambos lados.
Grabador: -
Metal: Plomo - Ф 44 mm
La Efímera Vida del Banco Comercial de Chile
La trayectoria del Banco Comercial de Chile es un reflejo de la volátil y dinámica banca chilena de finales del siglo XIX. Fundado en 1889 por decreto del Ministerio de Hacienda, el banco se estableció como sociedad anónima con la crucial autorización para emitir billetes, una facultad común en el sistema de "banca libre" de la época, donde múltiples entidades privadas imprimían su propia moneda. Esta libertad, sin embargo, conllevaba riesgos inherentes en un contexto sin una supervisión centralizada robusta y tras la inestabilidad de la crisis de 1878.
En 1894, el Banco Comercial se dividió en dos: el Banco Comercial de Chile, que continuó con las operaciones bancarias tradicionales, y el Banco Comercial Hipotecario. Esta escisión ilustra la creciente especialización del sector financiero, donde los bancos hipotecarios se enfocaban en préstamos a largo plazo garantizados por bienes raíces, vitales para el desarrollo agrícola y de infraestructura del país.
La vida del "nuevo" Banco Comercial de Chile fue breve. El 8 de enero de 1902, se autorizó su disolución y liquidación. Las razones exactas de su cese no están detalladas, pero en ese período, la desaparición de bancos solía deberse a problemas de liquidez, mala gestión, o la incapacidad de afrontar las presiones económicas y la competencia. Este tipo de eventos era habitual en un sistema bancario que aún estaba consolidándose.
Por su parte, el Banco Comercial Hipotecario tampoco perduró de forma independiente. Apenas dos años después de su creación, el 14 de agosto de 1896, sus activos y pasivos fueron asumidos por el Banco Hipotecario de Chile (fundado en 1893). Este movimiento de absorción es un claro ejemplo de la tendencia a la consolidación que se observaba en la industria bancaria chilena.
Otras Medallas Relacionadas